jueves, 14 de marzo de 2013

Como quisiéramos que esto no sucediera....

Estamos acostumbrados a ver animalitos atropellados; hemos visto de todo, pero el de hoy en la tarde...realmente ¡nos impacto!
El pobre animalito tenía las dos patas delanteras fracturadas, sus deditos estaban destrozados, la piel del cuello y espalda estaba desprendida, tenía muchas costillas rotas y lo peor...estuvo toda la noche y parte del día de hoy sufriendo. Gracias a Dios el joven Mauricio Carrera se compadeció de el y como pudo lo metió a su casa (Blvd Hermanos Serdán #709) para que no lo volvieran a atropellar, acudimos por el y la eutanasia fue inmediata.